Blanca Fernández, consejera de Igualdad, ha visitado esta mañana junto a Ana Belén Chacón, concejala de Igualdad, y Carmen Olmedo, delegada de la Junta, y Carmen Pimenta, directora provincial del Instituto de la Mujer, en el Centro Local de la Mujer de Ciudad Real
Ana Belén Chacón, le ha dado la bienvenida al Centro, agradeciendo su presencia “ya que creemos que va a hacer un trabajo estupendo ya que hay mucho trabajo por hacer, un trabo muy creativo, ya que podemos hacer mucho por las mujeres, y estamos muy contentos y desearle que le vaya muy bien, y sabe que en esta casa va a ser muy bien recibida”.
La consejera de Igualdad valoraba cómo este Centro de la Mujer de Ciudad Real “aunque ha tenido distintas ubicaciones, y ha pasado por diferentes gobiernos, lleva abierto desde el año 1985. Son muchos años atendiendo a miles de mujeres, muchas de ellas en situación de vulnerabilidad”.
Fernández, destacaba cómo este año pasado los centros de la Mujer en la provincia de Ciudad Real han atendido 27.000 consultas en las que han trabajado los equipos de profesionales, que han atendido a unas 6.500 mujeres. “Es una labor imprescindible, y ahora que hay un movimiento político representado por la ultraderecha que contesta a las políticas de igualdad, yo les haría reflexionar y les diría que, gracias a la profesionalidad de estas personas, decenas de mujeres han sido rescatadas de las garras del maltrato y de la violencia de género, y no sólo ellas sino sus criaturas”.
La consejera también ponía en valor cómo estos centros también orientan a proyectos empresariales, laborales, proyectos de vulnerabilidad psicológica… “Son centros integrales con profesionales que están preparados”. El motivo de esta visita, ha sido ver “cómo podemos mejorar desde la Consejería de Igualdad los Centros de la Mujer de Castilla-La Mancha”.
Además Fernández, también destacaba cómo desde el 1 de abril se han cuadruplicado la altas en la Seguridad Social de las cuidadoras no profesionales en el Sistema de Dependencia, pasando en Castilla-La Mancha de 343 a las 1.300, “y hay que seguir trabajando en esa línea porque esto también es igualdad, porque una persona que dedica si vida a cuidar de los más vulnerables de sus familia, el tener un alta en la Seguridad Social le permitirá tener una pensión en el futuro”.
