Bernardo Ortega, secretario general del partido Popular de Villarrobledo (Albacete), ha comparecido ante los medios de comunicación para hablar del malestar generado entre los ciudadanos de la localidad por la pasada cabalgata de Reyes Magos.
Ha recordado el concejal popular cómo en la citada cabalgata “se pudo ver la falta de organización y el último esperpento preparado por parte de la concejala de cultura, Trinidad Moyano y el alcalde socialista Alberto González”.
Ortega ha definido la cabalgata como “un popurrí que nadie sabe cómo catalogar, y que algunos dicen que parecía más un desfile de carnaval que una cabalgata de Reyes, en la que se vio gente bebiendo alcohol, música no adecuada para este evento, muñecos de Disney que no sabían hacia dónde ir, desorganizados, y, principalmente, algo que nos dejó atónitos como fue la presencia de un marciano verde con sus atributos sexuales al aire, escena que nos produjo vergüenza ajena y gran indignación, y provocó que los niños más mayores que ya se daban cuenta preguntarán qué hacía allí ese personaje”.
Ha dejado claro Bernardo Ortega que esta es la cultura de la que tanto alardea el alcalde y la concejala socialista, “lo cual es una auténtica sinvergonzonería, ya que con la ilusión de nuestros hijos no se juega”.
El concejal popular ha recordado comentarios hechos en otras ocasiones tanto por el actual alcalde socialista como por algún concejal, en los que le echaban en cara lo que a juicio de los socialistas fue la cabalgata de Reyes más corta, la del año 2014, “y yo la definiría como sencilla y austera, ya que no quedó más remedio que hacerla así porque no podemos olvidar la situación en que el PSOE de Villarrobledo, con Pedro Antonio Ruiz Santos a la cabeza dejó el ayuntamiento, con un montante de 52 millones de euros de deuda, 4.000 facturas en los cajones, facturas por valor de 40 millones de pesetas en comilonas de los socialistas, 12 millones de euros de deuda a proveedores, y tuvo que ser el Partido Popular y Valentín Bueno el que pagó estas facturas con el Plan de pago a proveedores puesto en marcha por el gobierno de Mariano Rajoy; así que no quedó más remedio que hacer así la cabalgata, a pesar de ser nosotros los primeros que no estábamos de acuerdo, pero por responsabilidad política era obligatorio hacerla así”.
Ortega también ha recordado cómo fue la cabalgata del año 2015, con las cuentas más saneadas, “se pudo organizar una cabalgata en condiciones, pero de esta cabalgata no le interesa hablar a los socialistas”.
Ha insistido en el sentir de la gente, en que esa cabalgata parecía más un desfile de carnaval, “porque al alcalde socialista le gusta mucho vivir el carnaval, pero solo la parte festiva, como si fuese un ciudadano más, porque la de la responsabilidad como alcalde de Villarrobledo, ésa no, como ya vimos en el primer carnaval que organizó el año pasado, que cuando cayó una vigueta y le dio a un ciudadano, no pudo ser localizado, ya que se encontraba de copas; como de copas también estaba el día del concierto de Navidad de la Banda de música de Villarrobledo, en el último concierto del año de su 150 aniversario, y no asistió al evento ni él ni ninguno de los miembros de su equipo de gobierno, porque prefirieron quedarse de copas ya que estuvieron de comida de concejales socialistas; y todo esto dicho por ciudadanos que los vieron, despreciando así a la banda de la localidad”.
Bernardo Ortega ha insistido en que esa es la “cultura de vergüenza y desprecio que practica el alcalde socialista y su concejal de cultura en nuestro pueblo”.