Articulo de Opinión de Álvaro Toconar Calleja Secretario de Ideas y Programas de JSPT
Hoy, 6 de Diciembre, hace exactamente treinta y ocho años que fue ratificada en referéndum la Constitución Española de 1978 con un 87% de votos a favor. La Constitución es a día de hoy la norma suprema de nuestro ordenamiento jurídico y la base del funcionamiento de nuestra sociedad
Pero no sólo es la norma suprema, sino que significa mucho más, al igual que lo hizo en el momento de su aprobación. La Constitución de 1978 supuso la constatación de que los españoles anhelaban libertad, sin duda una de las esencias del ser humano y que se había visto totalmente limitada durante el franquismo para pasar a ser un derecho fundamental con la aprobación de la carta magna. Fue este texto también el que puso fin a una sociedad dividida ya no sólo durante la dictadura franquista, sino durante varios siglos. Dividida por enfrentamientos como los ocurridos en la Guerra de Sucesión entre franceses y austriacos por ver quien heredaba el trono de la dinastía de los Austria, o como el ocurrido en la Guerra de Independencia contra el imperio francés y los afrancesados (antesala de las disputas entre conservadores y liberales), así como la división entre republicanos y monárquicos y la posterior facción entre el bando sublevado y el republicano en la Guerra Civil.
Esta Constitución fue elaborada por los conocidos como “Padres de la Constitución”, representantes de los diversos partidos políticos que había en España en aquel momento, siendo un fiel reflejo de las distintas ideologías que había en nuestro país. Pero hay algo que tenemos que destacar y es el hecho de que a pesar de sus grandes diferencias, supieron dialogar, ceder y acordar para que en España se pusiera fin a los bandos y se abriera un nuevo tiempo de derechos y libertades, de bienestar, de años de libertad de pensamiento, de soberanía popular. En definitiva, comenzó la época más dorada de nuestro país por la que anteriormente habían trabajado nuestros antepasados, costándole a muchos de ellos incluso la vida.
A día de hoy es cierto que nuestra carta magna está siendo cuestionada por una parte importante de la sociedad que argumenta que es una constitución que no representa el sentir general y que tiene que ser reformada, pero también hay quienes incluso están totalmente en contra de ella. La postura de Juventudes Socialistas es clara y concisa: La Constitución de 1978 es el principal garante de la democracia en nuestro país y de la mano de esta norma el Partido Socialista ha podido desarrollar desde las instituciones que ha gobernado políticas como la construcción de una sanidad pública y universal, la elaboración de una educación pública, la creación de un sistema de pensiones que atienda a las capas más desfavorecidas de la sociedad, así como también el levantamiento de un sistema impositivo redistributivo en el que pague más el que más tiene.
Por ello, aunque es necesario abrir el debate sobre la reforma constitucional y sobre qué debe contener, es fundamental que se mantenga la esencia constitucional que nos ha permitido alcanzar los avances sociales de los que hoy disfrutamos. Para que pueda llevarse a cabo una reforma constitucional, se requiere del acuerdo prácticamente unánime de los partidos políticos, sólo de esta forma todos los españoles podrían sentirse representados por el sistema político, que al fin y al cabo es el espíritu con el que se creó y es este el principal elemento diferenciador de este texto constitucional con respecto a los anteriores que hubo en nuestro país, ya que se abandona esa famosa realidad de media España contra otra y se opta por una España unida en su diversidad.
En conclusión y como se ha remarcado a lo largo del artículo, hoy más que nunca se ha de poner en valor la importancia de nuestra Constitución y de los valores que representa. Es el marco jurídico que regula la convivencia en nuestro país y que protege a las minorías frente a las mayorías por muy fuertes que estas sean. Podemos modificarla y reformarla, pero siempre con el espíritu de que sea la Constitución de todos los españoles y no de media España contra otra.
Álvaro Toconar Calleja Secretario de Ideas y Programas de JSPT