Este fin de semana se han celebrado en la sala de conferencias de la Encina del centro cívico príncipe de Asturias de la localidad de Quintanar de la Orden (Toledo) las dos últimas sesiones de las Jornadas de Derechos Humanos en el cine español que se han venido desarrollado desde 23 de septiembre y que han contado con prestigiosos ponentes para tratar temas relacionados con los Derechos Humanos y el cine.
“Los derechos humanos y la Transición política en el cine español de esa época” ha sido la última de las conferencias que se han ofrecido en el Centro Cívico “Príncipe de Asturias” dentro de las Jornadas de Derechos Humanos en el cine español. José Luis Muñoz de Baena Simón, Doctor en Derecho y Profesor Titular del Departamento de Filosofía jurídica de la Facultad de Derecho de la UNED fue el encargado la ponencia.
Muñoz de Baena explicaba que la Transición no ha sido la mejor época de cine español pero analizando las películas que se hicieron en esta época sobre temas típicos de la transición, José Luis Muñoz afirmaba que se vislumbra “un cine que a pesar de ser tan poco comprometido desde el puntos de vista político anticipó muchas de las interpretaciones sobre los derechos que han venido después”.
Tal y como explicaba el conferenciante, en esta época es muy difícil encontrar una reflexión política explícita, sobre los grandes problemas políticos y, sin embargo, sí existía un cine muy social como el cine de quinquis.
José Luis se detuvo especialmente en los derechos políticos que comenzaron a aparecer tras la Constitución del 78 con una serie de cortes de películas que se pudieron visionar y que mostraban “lo apasionante que resulta ver un país que aún no tenía cultura política por aquel entonces”. Así, por ejemplo, en la película “Votad votad malditos” se ve como una serie de personas van a votar por no hacer otra cosa. “Si analizas esta película en la actualidad, decía De Baena, más aún con la situación política que tenemos, resulta impresionante ver cómo oscilamos entre los extremos de una cultura política inexistente porque el franquismo no había permitido que existiera; y otra totalmente desengañada porque ya se ha ejercido y ha producido cierta decepción”.
También es de destacar la proyección de una escena final de “Solos en la madrugada” en la que José Sacristán viene a decir que hay que hacer algo con “la libertad” siendo uno de los pocos discursos políticos que se hicieron en cine en aquella época. Este mismo discurso a su vez, demuestra la ausencia de esa cultura política, porque la gente no había descubierto lo que significaba la libertad.
Con la proyección y el análisis de diferentes fragmentos de las películas de la transición, Muñoz de Baena decía que “uno aprende a ver las películas de una manera diferente”. En ese sentido, aseguraba que “algunas películas te dan una cierta visión amarga ya desde el principio de la Democracia y nos demuestran que al final, muy probablemente, acabemos siendo escépticos antes de los que nosotros pensamos”.
En esta sesión, José Luis Muñoz estuvo acompañado por José Antonio Gómez, presidente del cineclub Quintanar,, así como por José Ángel Escudero, concejal de Cultura; y José María Viller, Piedad Heras, concejales del equipo de gobierno local quintanareño.
En la última sesión, se clausuraba el ciclo de estas I Jornadas con la proyección de la película “El inquilino” de José Antonio Nieves Conde y protagonizado por Fernando Fernán Gómez, en la que los asistentes pudieron ver que a pesar de los cincuenta y nueve años pasados desde el rodaje de la película se puede extrapolar aquellos problemas de la vivienda de entonces con los sufridos en esta última década desde que estallara la burbuja inmobiliaria, el filme censurado en la época se pudieron ver los dos finales rodados de la película el censurado y el permitido por la censura. Tras su proyección se abría un interesante coloquio posterior con el público en el que participó también José Luis Muñoz de Baena y Juan Antonio Gómez.