Azulejería de la fonda, Molinos y Casa del Hidalgo
El pasado 27 de junio se publicaron en el Diario Oficial de Castilla La Mancha la iniciación de los diez expedientes BIC con motivo del IV Centenario de la muerte de Cervantes, de los que tres corresponden a bienes patrimoniales de Alcázar de San Juan. La azulejería de la fonda de la estación de ferrocarril, los Molinos del cerro de San Antón y el museo ‘Casa del Hidalgo’ pasarán a ser Bienes de Interés Cultural y estarán protegidos por la Junta de Comunidades de Castilla La Mancha. La delegada del Gobierno regional, Carmen Teresa Olmedo, tuvo ocasión de conocer estos recursos en su visita a Alcázar.
El Ayuntamiento de Alcázar de San Juan, a través del Patronato Municipal de Cultura, lleva tiempo trabajando junto a la Viceconsejería de Cultura para sacar adelante estos expedientes y conseguir la declaración BIC de estos tres importantes elementos artísticos, culturales y patrimoniales. Una acción que se enmarca dentro del IV Centenario de la muerte de Cervantes, ya que desde la Junta se quieren proteger y reforzar los bienes patrimoniales cervantinos y quijotescos.
Con la declaración BIC de la azulejería de la fonda de la estación, de los Molinos y de la ‘Casa del Hidalgo’, se dotará a la localidad de una nueva oferta de turismo cervantino, al ser incluidos en el catálogo patrimonial de Castilla La Mancha. Además de asegurar la protección de una parte importante del patrimonio alcazareño y castellano-manchego.
Rosa Melchor, alcaldesa alcazareña, mostró a la delegada de la Junta, Carmen Teresa Olmedo, algunos de estos bienes, como la azulejería y el museo ‘Casa del Hidalgo’. En su visita, la delegada aseguró que el sello BIC “dará a este patrimonio alcazareño la importancia que se merece, aportando un marchamo de calidad y asegurando que la historia y el valor artístico de estos elementos no desaparezca con el tiempo”.
De los tres bienes que serán declarados BIC cuando a finales de julio concluya el período de información, el más destacable es la azulejería de la fonda de la estación, por su singularidad y porque es el único que, de momento, no cuenta con una protección por parte del Ayuntamiento, ya que se encuentra en unas instalaciones que pertenecen a Adif.
La azulejería es un elemento de interés patrimonial ligado a la historia del ferrocarril en Alcázar de San Juan. Los paneles de azulejos de la fonda proceden del taller cerámico de Mensaque Rodríguez, en Triana (Sevilla). Son imágenes quijotescas que reproducen, a modo de historieta, 11 capítulos de la novela de Cervantes. Su origen se remonta a principios del siglo XX, entre la celebración del III Centenario de la publicación del Quijote y la Exposición Iberoamericana del año 1929.
