Ecologistas en Acción denuncia los hechos ante la Dirección Provincial de Agricultura. Exigimos la urgente paralización de las obras. el cese de los responsables, y que se sancione por infracción muy grave a Tragsa y a la Diputación.
El proyecto de camino entre Majadas y Uña que afecta a una zona de extraordinario valor ambiental del Parque Natural de la Serranía de Cuenca, no sólo se ha autorizado indebidamente, sino que acumula nuevas irregularidades, esta vez en el inicio de las obras.
Tras visitar la zona donde se han iniciado los trabajos y consultar documentos en el ayuntamiento de Majadas y con distintas instancias de la Consejería de Agricultura, Medio y Desarrollo Rural, se ha comprobado que Tragsa, como empresa constructora, y la Diputación de Cuenca, como contratante de dicha empresa, han incurrido en diversas y graves irregularidades.
Éstas tienen que ver con el incumplimiento de varias estipulaciones dictadas en la declaración de impacto ambiental. En primer lugar, las obras se iniciaron sin que se nombrara al responsable del seguimiento ambiental de las mismas. En segundo, no se ha procedido al replanteo y balizamiento completo de la zona de afección de la obra. Y, por último, tampoco se han identificado y protegido las zonas con presencia de especies amenazadas de flora.
Sin estas actuaciones, que son preceptivas y previas al inicio de los trabajos, la obra no se debiera haber iniciado. Haberlo hecho supone un daño y un riesgo evidente para los ecosistemas protegidos del Parque Natural. Por ello, en la denuncia remitida por Ecologistas en Acción a la Consejería de Agricultura, Medio Ambiente y Desarrollo Rural y a la Dirección Provincial de Cuenca se pide que se considere como una infracción muy grave, sancionable entre 150.000 y 450.000 euros, y que se decrete la paralización inmediata de las obras.
Los hechos denunciados son aún más graves si cabe, dado que han sido cometidos por una empresa pública, Tragsa, y un órgano administrativo, la Diputación de Cuenca, que debieran ser particularmente celosos en el cumplimiento de la normativa medioambiental.
Ecologistas en Acción exige a ambas entidades que los responsables de tales actuaciones sean inmediatamente cesados.