Dotada con un total de 115.000 euros
El estudio pretendedesarrollar una metodología que permita valorar, de manera objetiva, a pacientes con esguince cervical tras un accidente de tráfico.
La importancia de esta investigación radica en la mejora del conocimiento sobre los cambios que pueden darse en la sensibilización central en estos pacientes y que pueden estar relacionados con el dolor neuropático.
El Hospital Nacional de Parapléjicos de Toledo ha recibido una ayuda a la investigación científica en materia de salud para una iniciativa que está desarrollando un grupo de investigadores, liderada por el traumatólogo, Andrés Barriga.
Así, la Fundación Mutua Madrileña, en su XII convocatoria anual para dichas ayudas ha concedido un total de 115.000 euros al estudio sobre el dolor en el esguince cervical crónico. Este estudio se enmarca dentro de los 16 proyectos de investigación clínica de toda España a los que la aseguradora ha concedido más de 1,7 millones de euros.
El proyecto, que lleva por título “Diagnóstico de la simulación vs dolor crónico en el esguince cervical: aplicación de biomarcadores cuantitativos basados en la sensibilidad, función motora y resonancia magnética”, tiene como objetivo desarrollar una metodología que permita valorar de una manera objetiva a pacientes con esguince cervical, tras un accidente de tráfico.
Según el investigador principal de este estudio, el traumatólogo del HNP, Andrés Barriga, en España aproximadamente el 15% de los accidentes de tráfico provocan un esguince cervical o síndrome de latigazo cervical (SLC). En este sentido, aunque en la mayoría de los casos el dolor de cuello y la sintomatología que se deriva de él, como pueden ser los vértigos, la visión borrosa o el hormigueo en las extremidades, ceden en pocos días o semanas, hay un porcentaje de pacientes en los que dichos síntomas continúan y el dolor pasa a ser crónico, a pesar de que en las pruebas diagnósticas no se observe ninguna anomalía.
Una de las causas de que no desaparezca el dolor en ese grupo de pacientes, podría ser la existencia de una sensibilidad central y disfunción del sistema endógeno de modulación al dolor, tal y como se ha demostrado en otros grupos de pacientes, como las personas con lesión medular y dolor neuropático y los pacientes con fibromialgia.
La importancia de este estudio radica en la mejora del conocimiento y diagnóstico de los cambios que pueden darse en la sensibilización central, en pacientes con esguince cervical crónico y que pueden estar relacionados con el dolor neuropático.
Así, se persigue mejorar el pronóstico en el síndrome de latigazo cervical y proporcionar herramientas con las que se llegue a un diagnóstico objetivo.
En este estudio participan, además de la Unidad de Cirugía de la Columna del Hospital de Parapléjicos, liderada por el traumatólogo Andrés Barriga, diversos grupos de investigación de dicho hospital, como el de Biomecánica, Resonancia Magnética y Función Sensitivomotora. También participan el servicio de Neurocirugía del Hospital Virgen de la Salud de Toledo y la Escuela de Fisioterapia de la Universidad de Castilla-La Mancha.
Más de 1,7 millones de euros en investigación
Las ayudas concedidas por la Fundación Mutual Madrileña en 2015 ascienden a más de 1,7 millones de euros en proyectos desarrollados en 27 centros españoles. Así, estas ayudas se han centrado en estudios de investigación relacionados con la leucemia, los trasplantes de células madre sanguíneas, las enfermedades raras que se manifiestan en la infancia y la traumatología y sus secuelas, debido a la importante relación que tienen con la siniestralidad vial.
Entre los criterios que el Comité Científico de la Fundación Mutua Madrileña tiene en cuenta a la hora de seleccionar los proyectos se valora, además del interés científico del mismo y de su impacto social, el hecho de que la investigación esté liderada por jóvenes investigadores menores de 40 años, con el objetivo de impulsar sus carreras profesionales y retener científicos en nuestro país.
En este sentido, este año 2015 las ayudas se han repartido en proyectos liderados por centros hospitalarios de siete comunidades autónomas: Andalucía, Castilla-La Mancha, Castilla León, Cataluña, Comunidad Valenciana, Galicia y Madrid.