Bajo el lema : “A Dios gracias que nos da la victoria” adolescentes entre 12 y 16 años participaron en este multitudinario encuentro
La delegación Diocesana de Pastoral Juvenil de Ciudad Real ha organizado un año más, esta vez en Villarrubia de los Ojos, la Copa Diocesana, singular evento que ha convocado a varios centenares de jóvenes de toda la provincia.
Según nos indican desde la propia delegación Diocesana de Pastoral Juvenil, el encuentro consistió en tres jornadas, una de inauguración y presentación de los equipos, y otra en la que se celebraron los partidos de futbol y baloncesto en las instalaciones deportivas del Ayuntamiento de Villarrubia de los Ojos. Y donde se contó con la inestimable ayuda de árbitros, voluntarios, médico, sanitarios y Protección Civil
Durante esta jornada se realizaron una serie de talleres para que los jóvenes conocieran distintas realidades de la Iglesia: pastoral universitaria, proyecto de integración Arcoíris de la parroquia San Juan Bautista de Puertollano, JMV.
La tercera jornada, se disputaron las finales en lo referente a deportes. Posteriormente se celebró una Eucaristía en la que participaron una gran cantidad de jóvenes.
Desde Pastoral Juvenil añaden que este encuentro no hubiera sido posible sin la colaboración de diferentes instituciones locales y colectivos que se han volcado para que todo transcurriera de la mejor manera posible como la Parroquia de Villarrubia, en todos sus grupos y realidades, las Hermandades, voluntarios de acogida, de acompañamiento de grupos, de realización de las comidas y como no, el Ayuntamiento de Villarrubia de los Ojos.
Para Encarnación Medina, alcaldesa de Villarrubia de los Ojos, “ha sido todo un éxito celebrar este encuentro en Villarrubia de los Ojos” y se muestra muy satisfecha por la colaboración de todas aquellas personas que han hecho posible que esta actividad haya salido adelante. Medina añade, que en esta celebración de la Copa Diocesana se ha podido ver a una iglesia joven y con fuerza con muchas ganas de luchar en estos tiempos en los que es tan difícil ser cristiano.
